Los millenials: guía rápida para entenderlos y trabajar con ellos

Hoy, por primera vez en la historia; se puede encontrar en las oficinas y lugares de trabajo a 4 generaciones trabajando juntas: los tradicionalistas (nacidos entre 1922 y 1945), los baby boomers (1946-1964), la generación X (1965-1978) y los millenials (1979-1997)

 

Los millenials nacieron en una era de bonanza económica en comparación a sus padres y abuelos, y están acostumbrados a la gratificación inmediata en todos los sentidos, se sienten totalmente cómodos con realizar diversas tareas a la vez, son multitasking; pero estas características son precisamente las que los convierten en un reto para poder trabajar armoniosamente con ellos. Aquí les compartimos 4 claves fundamentales para comprenderlos mejor: 

 

Prefieren logros individuales a trabajar en equipo: La revista Time los acusó de ser la generación más narcisista de la historia sin embargo es mejor comprenderlos como una generación que relaciona los logros laborales y profesionales con su autorrealización personal y no tanto como un logro colectivo o de la organización en la que colaboran.

 

No valoran la estabilidad laboral: por lo mismo que comentamos  en el punto anterior; ellos no reparan en creer que saben más que sus jefes por lo que expresan libremente sus ideas y cuándo sienten que sus ideas no son escuchadas, o peor aún no son reconocidos por tenerlas no dudan ni un segundo en cambiar de trabajo.

 

Son la generación mejor preparada académicamente: es necesario aceptar que su educación universitaria estuvo acompañada de experiencias multiculturales, acceso total a tecnología e instalaciones y equipo de vanguardia, lo cual les da una clara ventaja en muchas áreas y una maestría en manejo de la tecnología que hay que saber aprovechar.

 

Éxito antes que compromiso: los millenials anteponen el éxito profesional a la realización familiar pues vienen de ver cómo el divorcio fue tan frecuente en sus padres, además prefieren prolongar la soltería hasta que se sientan plenamente seguros de poder adquirir compromisos tan importante como lo es el ser padre/madre.