México y Brasil: Motores de América Latina
En los últimos años, empresarios de todo el mundo han visto a América Latina como el lugar donde invertir y un nuevo mercado donde promocionar sus servicios y productos. De entre todos los países latinoamericanos hay dos que llaman particularmente la atención dadas sus últimas tasas de crecimiento, nos referimos a México y Brasil. Por eso, en el blog de hoy hablaremos de estas dos importantes figuras en el ámbito de la región.
Comenzaremos hablando de Brasil, desde el período del presidente Fernando Enrique Cardoso (1995 - 2003) y hasta la fecha, han implementado políticas macroeconómicas exitosas que acabaron con la gran inflación que azotaba a ese país desde hacía años. Aunado a ello mayores oportunidades de crecimiento aumentaron la cantidad de personas de clase media y los programas de transferencia de ingresos ayudaron a muchos a salir de la pobreza. Esto condujo a Brasil a tasas de crecimiento del orden del 7.5% en 2010, (Fuente FMI) con lo cual llego a compararse con China e India. Incluso llego a obtener un lugar dentro del G-8 en 2005. Su estabilidad en la crisis financiera de 2007 -2008 parecían validar los pronósticos más optimistas para el futuro económico del país. Sin embargo para 2013 su tasa de crecimiento solamente alcanzó el 2.3% (Fuente FMI) con lo cual su crecimiento se vio truncado. De acuerdo a la OCDE, Brasil debe redefinir su política de gastos, reformar sus códigos de impuestos y laborales así como continuar manejando la inflación si es que quiere regresar a sus anteriores tasas de crecimiento.
Por otro lado, tenemos a México, país que a diferencia de otros países latinoamericanos no ha basado su crecimiento en el boom de los commodities sino como resultado de las políticas económicas implementadas por sus presidentes desde 1994 después de un severa crisis monetaria. Fue así como tras años de devaluaciones, altos deficits en las cuentas corrientes, excesivos promedios de inflación y un déficit en los gastos, México se consolidó como una de las economías más estables del mundo. Por ejemplo, sus reservas internacionales se incrementaron de $35 billones (de dólares) en 2000 a $163 billones en 2012 (Fuente: FMI) y en la última década México firmó 44 tratados de libre comercio, más que cualquier otro país en el mundo estableciéndose así como uno de los mayores exportadores del mundo de bienes fabricados y el tercer más importante socio comercial de los Estados Unidos.
También es de llamar la atención que en ambos países, independientemente de las políticas económicas de los gobiernos o factores internacionales, una floreciente clase media ha incrementado la demanda de oportunidades económicas, mejores trabajos, menor inflación y un gobierno eficiente, haciendo que las expectativas de crecimiento de ambos países mejore. Lo cual esperamos que siga sucediendo.